Las palabras son los sonidos del alma

Gracias a la expresión oral y escrita de nuestras palabras, nuestra alma se libera, somos nosotros mismos.

jueves, 10 de diciembre de 2009

COMENTARIO SOBRE ARTÍCULOS DE OPINIÓN



Al igual que muchos de mis compañeros, he decidido decantarme por el artículo de La Opinión, es decir, por el de Domi del Postigo.

Con respecto a los otros dos artículos, puedo decir que, con respecto al de Antonio Gala, no lo he escogido porque trata un tema que aunque sea muy actual, creo que no sería capaz de dar unos argumentos demasiado seguros, ya que no conozco en profundidad el asunto, y por lo tanto sería mas bien un punto de vista muy subjetivo y poco convincente.
Del artículo de Pérez -Reverte, me baso en lo mismo, la temática. Me parece más una historia personal, escrita en el estilo de Juan Cacho (expresiones desenfadas, "palabras malsonantes"...), sobre la vida de un cámara y su peculiar relación de amistad con el autor.Además me parece algo extenso para ser un artículo.

El artículo sobre "Enrique está solo", me ha llamado bastante la atención. Me parece muy bonito el gesto que tiene Domi  con su hermano  y además, denuncia una situación real, en la que por más que digamos "yo nunca lo haría"; en nuestro interior, sabemos que los prejuicios son,  hoy en día, uno de los problemas más frecuentes  que amenazan a nuestra sociedad.

Es triste comprobar como un pobre anciano, que no tiene mayor inconveniente que su edad y su estado de salud, no sea aceptado como viajero en un transporte público (taxi) o se le niegue una silla de ruedas en el centro sanitario en el que acaba de ser atendido.

También creo conveniente destacar, como se señala indirectamente al comienzo del artículo, la posición de los políticos en este tema.
Una vez más me remito al  "engaño" de los medios, mencionado también en mi artículo de opinión. Nos hacen celebrar el día de las personas mayores, respetar a los ancianos y prestarles ayuda es una obligación de todo buen ciudadano.
 Ahí tenemos a esos buenos ciudadanos que se niegan a llevar a Enrique a su casa e incluso lo echan del hospital.
Menos mal que todavía quedan personas que se compadecen de él y lo llevan a su casa aunque para ello tengan que soportar el mal olor  que desprende durante un rato o se les estropee la  valiosa tapicería de su coche.

En cuanto al lenguaje y el estilo,  de forma similar al artículo del país, se trata de un lenguaje muy coloquial, accesible a todo tipo de lectores, sin dejar de lado algunas palabras  técnicas o expresiones, que dejan entrever el nivel del autor.



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